22 marzo 2011

más por menos

Hoy quería colgar una obra que vi hace poco y que me llamó la atención. Se trata de un proyecto solidario, en el que se debía dotar de una pequeña biblioteca a los niños del orfanato de Safe Heaven en Tailandia. El pequeño edificio lo desarrollaron estudiantes de la universidad de ciencia y tecnología de Noruega.

Lo que me gustó de éste proyecto es cómo utilizando los medios locales, que eran bastante escasos, consiguen realizar un elemento con carácter y racionalidad. Creo que la arquitectura bien hecha, bien planteada, no depende de los materiales ni de la calidad con que se construya, si no de la intención con que se proyecta.

Se que es un edificio humilde y posiblemente a algunos les parezca ridículo, pero creo que tiene muchísima fuerza, además de una planta exquisita.















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